¿Cómo prevenir y curar los sabañones?

Los sabañones suelen aparecer en invierno ante las bajas temperaturas y son una auténticas pesadilla para aquellos que los sufren. Desde Parapoteca compartimos contigo algunos consejos que te ayudarán a prevenir y curar los sabañones.

Aunque parece que nadie está totalmente a salvo de ellos, es cierto que algunas personas son más propensas que otras a sufrirlos. La mala circulación, el exceso de frío, la humedad, los cambios bruscos de temperatura o la ropa inadecuada suelen ser los principales causantes de esta afección.

Normalmente es más común que aparezcan en los dedos de las manos, pero también pueden salir en los pies o en las orejas, es decir, en la parte distal de los miembros.

¿Qué es un sabañón?

Pero, ¿qué es un sabañón? ¿cómo detectarlos? Un sabañón es una inflamación dolorosa de pequeños vasos sanguíneos de la piel que se produce como respuesta a la exposición constante al frío. También se definen como hinchazones o ulceraciones de la piel que normalmente suelen causar picor, dolor y ardor, entre otros.

Son el resultado de la contracción de los vasos sanguíneos en la parte distal de los miembros a consecuencia del frío.

¿Cómo prevenir los sabañones?

Para evitar los sabañones, las medidas preventivas son las más importantes. Una de las recomendaciones más importantes es protegerse del frío con guantes y zapatos adecuados cada vez que salgamos de casa. En caso de que suelan aparecerte los sabañones en las orejas, una solución útil es protegerte con orejeras o gorros.

Aquí te dejamos con una lista de consejos para prevenir los sabañones:

Mantener las manos, los pies y las orejas calientes y secas.
Conservar un ambiente interior cálido y seco.
Evitar la exposición al frío.
Llevar ropa adecuada que aísle del frío.
Utilizar guantes, calcetines y orejeras.
Practicar ejercicio de forma regular para mantener una buena circulación.
Evitar el tabaco ya que puede contraer los vasos sanguíneos y retrasar la cicatrización de heridas.
Aumentar la ingesta de alimentos con vitaminas C y A ya que son muy recomendables para restaurar los tejidos dañados.
Incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina D ya que estimulan la circulación.
Realizar muy suaves masajes en las zonas propensas a salir sabañones para estimular el flujo sanguíneo.
Aplicar con frecuencia productos para el cuidado de las manos como cremas hidratantes nutritivas para reducir la sequedad y la irritación de la piel.
Evitar los cambios bruscos de temperatura. Por lo tanto, nada de poner las manos ni los pies delante de la estufa o el radiador cuando llegamos del exterior, ya que los cambios bruscos de temperatura aumentan la probabilidad de que aparezcan porque se produce una vasodilatación brusca que es la causante de este tipo de afecciones.
Evitar rascarse.
Extremar la higiene para evitar infecciones.

¿Cómo curar los sabañones?

Aunque prevenir es mejor que curar, también hay solución una vez los sabañones han hecho su aparición. Dependiendo del grado de intensidad de las lesiones, el tratamiento puede consistir en la aplicación de un tratamiento tópico, es decir, una crema, o en un tratamiento sistémico con fármacos dilatadores para pacientes con patologías previas o lesiones recurrentes.

Normalmente, la aplicación de cremas suele funcionar en la mayoría de los pacientes. Si tu caso es persistente, recuerda contactar con un profesional sanitario.

Recuerda consultar con tu médico ante las primeras evidencias de sabañones para poder actuar a tiempo y evitar que vayan a más.